La operación de una empresa genera riesgos, algunos de naturaleza penal, derivados de situaciones como el contacto de representantes con funcionarios públicos en procesos comerciales, la gestión de la seguridad y la salud de los trabajadores, la realización de operaciones financieras o comerciales con personas naturales y jurídicas que pueden estar inmersos en una investigación penal.

Nuestra labor se avoca a lograr que los riesgos generados por la operación de la empresa no tengan contingencias penales, tanto a la persona jurídica, como a la persona natural. Para ello, partimos de un análisis pormenorizado de las necesidades de la empresa frente al problema concreto -actual o potencial- que ella tiene y diseñaremos una estrategia legal pormenorizada, la que -una vez aprobada- nos permitirá llevar a cabo los actos de defensa que aseguren la satisfacción de los intereses de nuestros clientes.

Los campos en los que desarrollamos nuestra práctica son los siguientes: